Pensar en todo lo que pudo haber pasado, en qué hiciste mal, qué pudo haberle hecho cambiar y no encontrar ninguna respuesta. Terminar pensando en que todo fue culpa tuya, fuiste una pesada, le agobiaste, no sabes exactamente que pasó, pero fue tu culpa.
Llorar por las noches pensando que le quieres pero él no se da cuenta, pasa de ti, pero aun así, tú le quieres, le habrías hecho la persona más feliz del mundo si te hubiese dado la oportunidad, pero no fue así.
Él cambió por completo, te dejó de hablar como siempre, paso de ser cariñoso a un chico aburrido, de la noche a la mañana, sin ninguna explicación, desde ese día todo cambió, nunca volvió a ser lo mismo.
Os conocisteis en persona, os llenasteis de abrazos, pero nunca pasó nada más y él no parecía querer que pasase.
Aquel día terminó, fue perfecto, pero después de eso, todo empezó a ser un asco.
Ya nunca habláis y si lo hacéis, tienes que hablar tú primero y después, seguir la conversación, porque sino, deja de hablarte.
Buscar todos los días el valor de saludarle, pero nunca encontrarlo.
Lo intentas todo, pero no consigues nada.
le pedirás explicaciones, cuando tengas el valor de hacerlo, hasta ese momento, seguirás llorando y preguntándote '¿por qué?'.
Mir, cariño. Estás intentando encontrar en él algo que no está, que ha desaparecido.
ResponderEliminarNo es la misma persona de la que te pillaste hará un tiempo, no es igual, ni creo que merezca la pena. No sigas llorando por algo que no merece la pena, eres joven. Mil personas te harán daño y te darás cuenta de la que merece la pena y la que no. ¿Que no te habla? Pues que se joda.
Tú eres tú, con él seguiste siendo tú, no hiciste nada mal. Cuando le preguntemos qué paso, tanto si es bueno como si es malo, pasarás página, no te dejaré caer, ¿vale?
Eres genial, y deberías saberlo tú mejor que nadie.
Te quiero, Mir :)